Cada día la niñera de mi hijo lo llevaba discretamente a un edificio en ruinas…

Vibras Positivas

Cada día, la niñera de mi hijo lo llevaba discretamente a un edificio en ruinas… Intrigada y preocupada, decidí seguirlos.

Desde hacía algún tiempo, mi hijo parecía apagado, distante.

Volvía a casa agotado, con ojeras, evitando cuidadosamente mi mirada. Mi instinto materno no me dejaba en paz: algo no iba bien.

Así que empecé a observar a Léa, su niñera. Trabajaba con nosotros desde hacía un poco más de un año. Siempre educada, dulce… pero últimamente, me escapaba un detalle.

„Nos quedamos tranquilos en casa“, me repetía con su sonrisa calmada. Sin embargo, al revisar las grabaciones de nuestras cámaras exteriores, vi que llevaba a Hugo fuera todas las tardes, y durante mucho tiempo.

Una mañana, tomé el día libre. Decidí seguirlos a distancia. Tomaron un callejón estrecho y se detuvieron frente a un viejo edificio en ruinas.

Léa sacó una llave y abrió una gran puerta oxidada. Mi corazón empezó a latir rápidamente… 💥

Los detalles están en el primer comentario 👇👇

Entré discretamente detrás de ellos, bajando una escalera de piedra helada. Abajo, una gran sala brillaba con guirnaldas brillantes.

Telajes de mil colores estaban cuidadosamente extendidos, acompañados de bobinas de hilo y una hermosa máquina de coser nueva. Hugo se giró, asustado.

“¡Mamá! ¡No es lo que piensas!”

Léa, visiblemente incómoda, finalmente confesó:

“Hugo quería hacerte una sorpresa. Encontró tu viejo cuaderno, el que mencionaba tu sueño de convertirte en diseñadora de moda. Sabe que lo dejaste por trabajar en la salud.”

Hugo bajó la cabeza. “Solo quería que fueras feliz… Le pedí a Léa que me ayudara a crear un taller para ti. Ahorré el dinero de mi cumpleaños para comprar la máquina.”

Las lágrimas cayeron antes de que pudiera detenerlas. Ese sueño que creía perdido… mi hijo aún creía en él.

Lo abracé llorando. “Gracias, mi tesoro. No solo me diste un taller… acabas de revivir un sueño que pensaba perdido para siempre.”

Calificar artículo
El Lindo Rincón