Déjenme contarles la increíble historia de Marion Mic Roberts. Imaginen a una mujer de 99 años, adornada con un collar de perlas, que decide participar en una carrera de 5 km. Sí, leyeron bien, ¡99 años! ¿Y saben qué? Terminó la carrera en 56 minutos.
Un año después, tras celebrar su centésimo cumpleaños, Marion volvió a aceptar el desafío. Esta vez, corrió los 5 km en 1 hora y 31 segundos. Es increíble pensar que a los 99 años nunca había corrido una carrera así antes.
Esta hazaña demuestra que nunca es demasiado tarde para empezar algo nuevo.
Si Marion participó en esta carrera, fue en gran parte gracias a su familia. Durante años, ella había ido a animar a sus nietos en la carrera anual de Connecticut. Un día, de manera espontánea, su hijo Chuck le propuso participar. Y así, Marion aceptó el desafío sin dudarlo.
Para su segunda carrera, esta abuela llevaba una elegante blusa y pantalones cómodos, y estaba acompañada por Chuck y su nuera Donna. Mientras corría, Marion escuchaba a Frank Sinatra para motivarse.
Terminó la carrera a la cabeza de la categoría de mayores de 80 años, recibiendo aplausos estruendosos al llegar. Imaginen la escena: corredores pidiéndole fotos, los organizadores entregándole una medalla. Marion estaba asombrada por tanta atención.
Marion se sorprendió por todo este entusiasmo. Ella pensaba simplemente en correr, terminar y volver a casa. Pero su desempeño tocó a muchas más personas de lo que ella imaginaba.
«Pensé que parecía divertido. Pensé que solo lo haría y volvería al final y me iría a casa. No esperaba todo esto», confesó.