Ahora, Isabelle y Abby Carlson son gemelas completamente normales. Son solo una copia el uno del otro, muy lindos y tímidos. Es difícil creer que hace diez años no hubieran podido sobrevivir…
Los bebés nacieron como gemelos siameses, con sus cuerpecitos unidos. Pero la parte más difícil de esta situación fue que el pequeño corazón de Isabelle latía en el pecho de Abby.
Y todos los órganos internos se mezclaron en dos cuerpos. Pero gracias a los especialistas, las niñas ahora pueden llevar una vida normal y plena.
Los médicos de Mayo Clinic han estado especialmente capacitados durante algún tiempo para realizar una operación tan compleja.
Se desarrolló en varias etapas y participaron equipos completos de médicos: del corazón, del páncreas, del hígado, de la cirugía plástica, etc.
Y lo más difícil es que el paciente no es uno, sino dos… Están en juego dos vidas que hay que salvar.
La operación más complicada se realizó el 12 de mayo de 2008, ¡trabajaron 17 médicos!
Lo logró, ambos bebés sobrevivieron y dos semanas después las niñas pudieron regresar a casa.
Ya han pasado 14 años. Las niñas viven una vida normal, van a la escuela, van a gimnasia, tienen muchos amigos, les gusta estar a la moda, se visten constantemente con diferentes atuendos.